El futuro de la humanidad


Por Vida Amor de Paz

Llegar a Durban, Sudáfrica para asistir como Delegado a la Cumbre Mundial del Clima – COP 17 ha sido una experiencia surreal.  Y lo digo así porque sólo el hecho de estar en una Cumbre  con Delegados, Ministros y Jefes de Estado de más de 194 Naciones que tienen la responsabilidad de llegar a Acuerdos para discutir el futuro de la humanidad, suena como si habláramos de ciencia ficción, pero no es así. 

El cambio climático es una realidad que ya estamos viviendo y experimentando con los fuertes huracanes, tormentas, deslaves, sequías o depresiones tropicales que nos han enlutado. Ha producido en nosotros aturdimiento ya que ni hemos terminado de reconstruir, ni atendido a las familias de los muertos, cuando el siguiente fenómeno climático nos pilla de nuevo sin que estemos preparados para enfrentarlo.

Los temas más relevantes para Guatemala en esta Cumbre son: a) el reconocimiento como país particularmente vulnerable, así como han sido reconocidas las pequeñas islas, los países africanos y los países menos desarrollados, b) la renovación del Protocolo de Kioto que vence en el 2012 y que es el único Acuerdo legalmente vinculante y equilibrado c) el tema del financiamiento a largo plazo, d) transferencia de tecnología, y e) el Fondo Climático Verde.

Como bien sabemos, en muchas Convenciones internacionales, se ha determinado que Guatemala es uno de los países más vulnerables del mundo al cambio climático junto al resto de Centroamérica. Es por ello, que los Delegados de Guatemala en Durban se encuentran en la recta final de una lucha férrea, para que se nos reconozca como particularmente vulnerables y así tener “acceso directo a los fondos que nos auxiliarán para contrarrestar el fenómeno.

El Fondo Climático Verde, ya va caminando y tengo la impresión que tarde o temprano lo tendremos, no así tan fácil la voluntad de bajar las emisiones de dióxido de carbono de la atmósfera por parte de algunos países industrializados a niveles todavía soportables por los seres humanos. Ya hemos llegado a 0.7 grados más de temperatura, pero si sobrepasamos los 2 grados, Centroamérica podría convertirse en un desierto tropical, sentenciada a muerte. Para hacerlo corto, de no poner targets altos de reducción de emisiones y que estos sean cumplidos por los países industrializados, podríamos hablar de 3 a 4 grados más de temperatura en el Planeta para el año 2020, y eso significaría migraciones de miles de millones de víctimas en todo el mundo  rumbo a lugares más seguros. 

Por más de diez años, a Guatemala le ha correspondido invertir en saldar los daños medidos en infraestructura y en pérdidas humanas. Tal y como dijo el Dr. Luis Ferraté, Jefe de la Delegación Guatemalteca en su discurso magistral que ha dado la vuelta al mundo, ¿“Cuánta gente tendrá que morir en el mundo antes de que lleguemos a un Acuerdo”?   Aunque sé que no hay límites para la ambición humana, cegando a quienes sangran el planeta, también creo en la esperanza y espero que esta vez despierten a tiempo “por amor” a sus hijos. Veremos si los resultados que surjan en esta Cumbre son alentadores para el futuro de la humanidad. Esté pendiente. vidamordepaz@yahoo.com